“El Programa no es tu vida”: reconociendo con el Diseño Humano las pautas colectivas que inhiben el desarrollo de tu Ser individual…

Siguiendo la estela de nuestro astro rey, el Sol,  desvelamos el significado de su tránsito a través de cada puerta/hexagrama, y cómo a través de la toma de conciencia de ello podemos observar hasta qué punto somos condicionados por ese programa por la fuerza condicionante de unas fuerzas mitológicas que siempre han controlado, condicionado e impuesto el desarrollo de la conciencia humana en base a estrategias homogéneas que aseguren la supervivencia como miembro de la especie.  

Del 9 al 15 de Septiembre el Sol en la puerta 47

Llegamos a la puerta 47, la Opresión, puedes ver por la imagen que elegí que es esta puerta, yo la tengo, siempre puedo entrar en ansiedad cuando mi mente está pensando de esta manera, no hay claridad, no hay perspectiva, soy yo, estoy tejiendo, tejiendo, tejiendo el pasado buscando la justicia, esta puerta le da sentido a las cosas. En el no-ser como parte de la corriente de la abstracción en un circuito de creencias, esto es una puerta y un canal que cree que el propósito de las relaciones tiene que ser la armonía, es decir que la armonía puedes ver la polaridad de la 47 es la 22.

Y la 22 es la Gracia, y está en un canal manifestado y la firma del Manifestador es la paz, y si somos una pareja no discutimos, si somos amantes no discutimos, creemos en eso, en la dualidad de las cosas si somos amantes, somos odiantes, no discutimos, odiamos, esa es la cuestión, pero no es que la armonía y la paz es la idea, vale,  lo que tiene sentido es que las relaciones son personas con las que estás acompañado, y esa es la manera del no-ser, y estas son personas que continuamente están molestas porque nunca encuentran la armonía.

Simplemente se preguntan que hacen mal, qué es lo que hacen mal, y que tanto de esta puerta es la auto-culpa, intentas darle sentido al otro, te comparas con el otro pero al final solo sabes de ti, no puedes saber del otro, con el otro, lo dejas hablar, lo único que está claro es que el otro no lo está viendo como tú, y eso significa que uno de los dos está equivocado, porque y tiene que ser el otro, porque la puerta 47 está buscando una conclusión que describa porqué tiene sentido que sigamos juntos en paz.

Podemos estar en paz y juntos si aceptas que tú me oprimes, fue tu culpa, si lo aceptas.., ok, te perdono, y podemos volver a estar en paz, pero si insistes en que no fuiste tú y que solo pude haber sido yo, lo siento pero voy a seguir buscando haber como hice yo algo a ti, y si tu esto, eso, aquello no lo dices, yo nunca hubiera dicho una cosa así. Esto está todo sucediendo adentro, tú, yo, y tenemos que estar juntos, no importa cómo, y en armonía, porque todo lo demás significa que hay algo que no entendiste, todo lo demás cuestiona tus creencias, no es algo según lo cual tu vives.

Si alguien tiene activación aquí, si tiene definición sobre todo, si tienes el sol/tierra de personalidad o los nodos aquí, mi visión es que como proyector, si fueras un Proyector Mental y éste fuera tu único canal, serías alguien que está aquí para guiar a los demás, serías alguien que está diseñado para guiar a las personas a través de la desarmonía, no la armonía, hasta los niños entienden la armonía, pero darle sentido a la desarmonía, porque siempre estamos discutiendo, ni por ti, ni por mi sino por el estilo del vínculo, está podrido y está alimentado por la co-dependencia.

Es porqué confiamos demasiado uno en el otro, o dependemos demasiado del otro y no tanto de nosotros, es que somos demasiado honestos con el otro pero no somos suficientemente honestos con nosotros mismos, es porqué insistimos en vernos como la oscuridad del otro, no la propia, vemos al opresor en el otro, y nosotros somos los oprimidos, vemos lo que nos hacen otros en nuestros centros abiertos pero no vemos lo que le hacemos nosotros al otro con nuestros centros definidos, porque la mayoría de seres humanos no son conscientes de sus definiciones, es algo que dan por hecho, y creen que es normal, y creen que es algo que todos tienen.

Cuando vives identificado con lo que no eres, lo que de hecho eres pues lo das por hecho, ni siquiera lo sabes que lo estás dando por hecho, haces un supuesto que lo que tú tienes todos lo tienen, y entonces lo que no entiendes es tu problema y los otros en lugar de ayudarte te hieren en esos lugares que has sido herido desde que llegaste al mundo. Esta es una fuerza en los vínculos en que la co-dependencia se alimenta, lo bueno es que el sufrimiento es tanto, tan sofocante, tan sucio, tan indigerible, que en algunos momentos casi que te das la oportunidad de salir de allí y ser honesto contigo mismo.

Y en ello reconocer que la desarmonía puede ser casi tan natural como la armonía, solo que es un momento en la ola, sabes que la polaridad para tus ideales es algo que puede ser integrado, y no algo que se pueda eliminar o borrar, es trabajo interno para reforzar tu espíritu y solo hay un modo de hacer eso, en la soledad de quién eres para ti, en la soledad de la consciencia individual donde quién tú eres es un individuo completo.

Ves, en esta semana los nodos ya cambiaron, y puedes ver lo que traen, es un énfasis profundo en el egoísmo individualista de la integración, es lo opuesto a lo de Harmonía, particularmente a través de la puerta 6 se establece la unión, cuando se establece la unión nada la puede romper o amenazar, cuando yo veo las personas que tienen el 59/6 y que tienen una individualidad tan profunda, yo ya sé que tienen un problema porque el 59/6 quiere eliminar las barreras individuales y fusionar a las dos personas en uno y la integración pues no puede.

Este es un tiempo en el que dado el individualismo tan fuerte que está trayendo el programa es muy probable que todos hagan algún comentario que el otro pueda percibir como egoísta, y eso es lo peor que se puede ser en Harmonía, porque está en contra de la unión. Entonces hay muchísima susceptibilidad y un potencial muy grande de que la frustración acumulada y el resentimiento y la rabia de repente salgan sin control, agresión más allá de lo verbal, la otra cosa que puede suceder es que si eres alguien que es un poco consciente y tienes una cierta experiencia en verte a ti mismo en las relaciones y ya no estás aferrándote a sueños infantiles sobre como deberían ser las relaciones armoniosas, ésta podría ser una oportunidad perfecta para aprender a estar en un vínculo y que eso no sea la negación de tu individualidad.

Es decir, encontrar un modo de poder ser las dos cosas y que esté ok cuando estés solo y que esté ok estar con el otro y también sin el otro, sabes, tener un sentido claro de para qué está el otro aquí, y para qué lo necesitas y para qué no, y cómo el otro puede ser una molestia, una interferencia.  Como ser de nueve centros tiene que haber un nivel en cómo te relacionas contigo que nadie más puede decir nada, al final eres tú siendo claro contigo mismo, y cómo alimentas la disfuncionalidad en los vínculos y de qué manera puedes de hecho corregir eso aprendiendo a integrar tu vulnerabilidad, tu coraje para exponerte al otro, y expresar al otro lo que realmente eres y no tener miedo a que puede que lo rechace, y bueno, si lo rechaza, al menos ya sabes a dónde estás.

Cuando ya no te aferras no tienes la armonía como el valor supremo en el modo en que enfocas tu relación individual con el amor y la verdad, y cuando el amor y la verdad respiran juntos en tu vida cotidiana todos los días, es una ecuación interna, y es algo que tiene que ver contigo y con el espíritu, con el alineamiento a tu espíritu y tu forma y no tiene nada que ver con cuales son las circunstancias externas.

Del 9 al 15 de Septiembre el Sol en la puerta 47

Esta puerta 47, la opresión, es una puerta que forma parte de la llamada cruz de la soberanía, la puerta 47 se oprime en parte por el vínculo, en parte porque quiere hallarle sentido a mantener el vínculo, pero luego no puede dejar de ignorar el modo en que el vínculo le obliga a veces escuchar cosas que preferiría no tener que escuchar, a ver cosas que preferiría no tener que ver, a renunciar a necesidades a las que preferiría no renunciar.

A disfrutar de necesidades que no podría disfrutar sin el otro, es decir, la conveniencia material, el impacto material que el otro tiene sobre tu propia vida, es conveniente o no, yo tengo la puerta 45, tengo la puerta 47, nadie diría que hay una relación entre ellas, y la hay, la puerta 47, veis, siempre lleva las cuentas del pasado de lo que el otro te cuesta, de lo que el otro te hizo ganar, del éxito material que el otro trajo consigo, del fracaso material.

Es decir, es el otro una inversión segura, es el otro una inversión interesante, eso es lo que le oprime, es el otro mejor que el otro, o es el otro peor que el otro, oooohhhhh.., que otro es el que más me conviene, como va a ser todo si me quedo con…, oooohhhh.., el no-ser, con el otro no sentía los conflictos que siento con éste, sentía otros conflictos, qué conflictos me conviene más, me conviene menos, ooohhhh…, harmonía.., con que otro armonizo más, con que otro armonizo mejor.

Porque armonizo más con el que menos me excita, porque me excita, porque deseo más al que más me hiere, al que más me confronta con lo que no es armónico en mí, porque amo más al que me hace sentir ganas de matarlo, porque amo más al más egoísta, porque amo más al que más me ignora, al que menos me escucha, porque amo más al que no tiene nada.., oooohhhh…, oooohhhh, los misterios del corazón humano.

Los misterios del pasado, de las emociones del pasado, los misterios de las emociones familiares y colectivas del pasado con las que cargamos en nuestro espíritu sin saberlo, sin saberlo, veis, yo comencé a escarbar en la basura emocional que llevaba dentro hasta que me dí cuenta, pero dije, espera, si ya llevo tres generaciones, esto no acaba nunca, hasta que me dí cuenta que estaba escarbando en las heridas de la humanidad, ya no eran las mías.

Simplemente el dolor de ser humano, todos los seres humanos somos hijos del agobio un poco, obviamente los que tienen esta cruz, los que tienen la puerta 47, los que tienen estas fuerzas de la harmonía un poco más, porque es de la gestión de ese agobio de las que nace la maestría de la armonía, pero también una armonía que puede ser perfectamente homogénea, homogénea, y cuanto más homogénea es la armonía, la hormonía, jaja, es una cuestión de tiempo que todos los monstruos se revelen de una sola vez.

La opresión, la opresión, el miedo a ser como uno es, el miedo a no ser todo lo que otro necesita, la expectativa de encontrar a alguien que te lo de todo, es decir, no solamente el dolor al que nos sometemos nosotros mismos, la demanda, la demanda a los demás que sean como nos satisface, de que sean como necesitamos de que sean como les queremos, creyendo que como les vemos nosotros es como son, incapaces de concebir que son diferentes en los ojos de otros que les miran, que nadie les ve como tu, que tienen vida propia.

De modo que, bueno, nunca les des por supuesto, y nunca les permitas darte por supuesto a ti, como único modo de evitar ese momento de odio a ti mismo, porque cuando le haces eso a alguien te lo haces a ti también, solo le puedes hacer esto a alguien y considerarlo legítimo cuando te lo haces a ti también, y esto, al mismo tiempo puede resultar doloroso, pero es también un instrumento de confesión con uno mismo, de evaluación fría y racional de cuestiones calientes, calientes, calientes, calientes.., uauhhh, hay que ser muy desapegado para poder razonar con frialdad respecto a cosas tan calientes, tan calientes, y trascender los celos.

Trascender la limitación de sentir a través de las diferencias de género, sentir como hombre, sentir como mujer, y poder sentir como humano, uauhhh, uauhhh, es como parirse a uno mismo, duele, duele, pero hay que tener el coraje de no tener piedad con el apego solo por que duele, y abrirse a la verdad, pero una verdad que uno se cuenta a uno mismo, no es una verdad que te cuentan otros, el porque las cosas son como son para ti en tu relación con otros no es una historia que el otro te pueda contar, es como es para ti porque es como es para ti, es como tu ves al otro, es como tu te ves a ti con el otro, es como tu ves el vínculo con el otro.

Es el propósito que el vínculo tiene para ti, eso es todo, eso es todo, si dejas que el otro juegue su parte a su manera el propósito y el vínculo están ahí, es más, cuanto más el otro puede jugar su parte a su manera, más, más dinámico, más potenciador del espíritu es el vínculo, y estoy hablando del vínculo como un principio de interacción social, no un vínculo particular o específico, sino una manera de sentirse ligado a aquellos que por un motivo o por otro marcan una diferencia en tu vida.

Porque no, relacionarte con ellos a partir de la verdad como base, porque solo la verdad, por dolorosa que sea, puede definir una confianza que inspira respeto y no sobreentendidos, una confianza que nunca llega a dar asco, una confianza de la que uno nunca se tiene que arrepentir. Veis que los disparadores sociales están ahí, es decir, el no-ser le van a sobrar excusas para tirarse a la piscina independientemente de que haya agua o no la haya.

(Extraído de: “El Programa no es tu vida” de Alokanand Díaz del Río)

 

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